tu aroma estaba en todas partes
en el trazo tembloroso de cada pincelada
confundiendose con el olor de mis aglutinantes
intentando diluirte de mi bastidor
bebiendo trementina cada noche en tu ausencia
rompiendo mis lienzos para olvidar tu rostro
negandome a ser complice de mis emociones
negando este sentimiento clandestino que galopa sin remordimientos
soy el cristo de 3 estacas
y tu la redencion de mis demonios
mi magdalena
mi ultima tentacion
mis mil supuestos
la taza de cafe medio vacia
el azote de dios en mis pastizales
mi waterloo
en esta guerra fria que impusiste como bella tirana
tu estas en todas partes
lo aprendi de tu silencio el dia que te fuiste
negandome el arrullo de tu voz
tu estas en todas partes
en el infierno de tu tacita presencia por las noches
cuando busco recrear nuestras charlas en las que yo solo escuchaba
cuando percibia tu descanso y lo imaginaba eterno a pesar de no tenerte al lado.
estabas viva entre mi pulso y el recorrer de mi sangre
cuando bombeabas cada gota impulsando a este organo que late debilmente
que recupera el brillo cuando imagina tu desnudes
cuando me arrullo en el pensamiento de tus senos
como aquel paraiso que me fue negado
como el oasis en este desertico estado de apatia.
declare mi muerte al escucharte
debi negarme a dejar que tus sonoridades se apoderaran de mi ritmo cardiaco
mil formas de morir
la mas cruenta de todas tu despedida
la mas bella y dantesca sin tus labios
sin tu voz recordandome lo fragil que es la vida
y que a pesar de intentar ser cada dia menos humano
en alguna parte de esta ciudad
tu duermes y yo me desangro
lunes, 26 de febrero de 2024
demasiado humano
viernes, 1 de diciembre de 2023
Tu es Partout
Y pensaste tu
que empecé a morir
el día que te fuiste.
Pero yo ya estaba muerto antes de tu partida .
Entre mis pastizales incinerados
por los pirómanos celadores.
Entre la cuna y el pesebre empobrecido .
En el arrullo de las sirenas en cautiverio,
tus melodías carecen de sustento y alma.
Llegaste a la rivera con cantos banales,
con aromas de fragatas encalladas.
Con el recuerdo de tus tripulantes nocturnos.
Todos fieros corsarios aventureros de agua brava.
Temerarios gandules carentes de empatía.
Todos ellos mis hermanos,
mis compañeros de viajes insanos hacia la locura de tus labios.
Prendí la vista hacia el horizonte de tu iris nebuloso.
La muerte nos sonríe a todos
como una recompensa a la traición de la vida.
Al imposible de tus ósculos inasequibles,
al insondable valor del aroma de tu clavícula.
Y pensaste tu que moriría en tu ausencia.
Mas yo ya estaba muerto esperando encontrarte,
para perderme en el vicio de tu cálida entrepierna.
En el calor de mil demonios húmedos,
en la redención de tus gemidos esporádicos,
todos falsos como la vida misma.
Y me dijiste tu esa noche,
yo estoy en todas partes,
mas no te equivocabas.
Te encontré en cualquier esquina,
en esta ciudad que nunca duerme y guarda tu aroma,
no te equivocaste.
Tu estas en todas partes!
viernes, 28 de julio de 2023
El mundo está en tu contra
Estabas pálida esa noche
con un cigarrillo en la mano .
con tu estoicismo en la mirada
y el pelo recogido.
estabas cálida esa noche
con el mentón afilado.
con la clavícula expuesta
y el cuello desnudo.
estabas frágil esa noche
con tu mirada fiera como es costumbre.
con la bandera roja entre las piernas
y tu voz de imponente capitana al mando.
estaba en la distancia yo esa noche
con mis lienzos rotos
y el lápiz en la mano.
con mis frases cuadraplejicas galopando en mi mente,
alborotando mis escritos.
borrando cada linea que forma tu rostro
cuando son mis trazos los que tocan tus labios
tomando justicia por el tiempo que no comparto a tu lado.
porque tus dioses me niegan tu aroma
y escupo al cielo
y los maldigo
y sangro
y vivo
y reviento en cada escrito
cuando escucho tu respuesta ...
sábado, 3 de junio de 2023
La ausencia omnipresente
En el recuerdo que acontece tu despedida,
yo aun busco tus frases en el incierto y desolado camino al que me desterraste.
Fueron tus excentricidades las que me atraparon en primera instancia,
tus risas nocturnas y esa tornasolada mirada que se reflejaba en mi monitor.
No hay culpas donde solo quedan recuerdos,
y los reproches se mezclan con la insalubre necesidad de ver caer mi esperanza de volver a escucharte.
El eterno espectador en la penumbra de tus pupilas,
bajo la tenue luz de los semáforos en los que disipas el tiempo como quimeras,
como arena entre mis manos que se escapa lentamente.
La fruta prohibida en el edén de tus caprichos ,
mi insana necesidad de retar a los dioses,
mi estúpida forma de jugarme la vida en cada linea que escapa de mis dedos,
cuando son mis escritos los que te buscan atolondradamente,
esperando que tu iris se pose sobre ellos y expresen algún tipo de reacción.
Mi socia en la distancia, mi cómplice tacita,
en la simplicidad de tus formas cuando poso mi lápiz sobre el lienzo.
Cuando fracaso en mis intentos de encontrar las tonalidades que describan tu esencia omnipresente.
Y me dijiste:" Yo estoy en todas partes",
mas te perdí para entenderlo.
Como la maldición de los apátridas,
intento regresar a tus tierras sin esperanza.
Vago incansablemente por las calles que recorres,
guardando la ilusión donde nuestros senderos se bifurcan.
Donde te robo alevosamente el ósculo que nunca pude darte.
Por las tantas noches compartidas,
esperando sentir tu aroma de ninfa nocturna.
Y escupo al cielo,
por que hoy tus labios embriagan otra boca y no es la mía,
mas no te culpo.
Hoy tu vives tu tiempo,
aquel que me fue arrebatado por caprichos del destino,
por designios que desconozco.
Maldigo a tus dioses arrabaleros,
los que se ensañan con mis ventrículos,
con este órgano débil que palpita tu nombre en la distancia y repite desesperadamente:
Nadia!! tu estas en todas partes !!!
miércoles, 1 de marzo de 2023
Lo que el tiempo no perdona
lunes, 5 de septiembre de 2022
Remesas del desfiladero
Nosotros recorremos las aceras opuestas de esta ciudad llena de caos,
mientras los caminos se bifurcan y se pierden entre las ramas de los sauces en otoño.
Es la garúa por las mañanas la que aflora tus primeros brotes,
la misma que me niega auxilio en estas áridas tierras que no recorres.
Entre pámpanos y crisálidas voy camino al desfiladero del imposible de tus labios,
de la muerte austera en el destierro de tu sonrisa,
de tus abrazos de consuelo,
de mi vivir prematuro,
y mi culposa forma de justificar mis reclamos.
Es la tortuosa necesidad de mirar en mi pasado,
aquella que me declara como sospechoso de crimen,
cuando te conviertes en la celadora de este órgano que late débilmente entre el bullicio.
En esta celda donde las tonalidades grisáceas predominan,
donde desprendes tu fragorosa predica nocturna y te despides.
En las largas noches cuando el minutero se detiene en tu ausencia,
cuando empieza la agonía de contar los segundos y su cruel forma de prologar el tiempo.
Es tu sadismo el que se ensaña con mis ventrículos,
tu abulia impuesta en declarada despedida.
Yo me mantengo inerme aferrándome a tus sonoridades,
a tu cándida forma de alegrar mis días.
Es el amanecer de este sentimiento en carne viva que se desangra cruentamente.
Es la herida purulenta de este amor en clandestinidad.
Soy quien secuestra tus pasos por las noches sin miedo a las consecuencias.
Este atentado premeditado en pos de tu atención,
este saqueo de corsario intransigente que rapta tu aroma.
Y si esta noche tú me empujas por la borda en la insondable necesidad de buscar tus manos,
no me culpes si me entrego a la bravura de tus profundidades.